Alicia Peressutti, una gran luchadora contra la trata de personas y además, ex auditora de la ciudad, mantuvo una gran amistad con el Papa Francisco, el Padre Jorge como ella lo llama.
Relató que el lunes muy temprano le sonó el celular y no dudó que tenía que ver con él. «Un hombre impresionante, un hombre santo, un hombre transformador, el portero de la Iglesia Católica».