Foto: Cortesía de Gustavo Ballas
El 12 de septiembre de 1981 el boxeador villamariense, Gustavo Ballas, obtenía el título mundial de la AMB en la categoría Gallo Junior . Fue el primer boxeador argentino en conseguir el título mundial invicto.
El miércoles 16 de noviembre de 2022, por el «Día del Deportista» lo entrevistamos, y aquí está el archivo. En la oportunidad, el ex boxeador y campeón del mundo en peso supermosca, Gustavo Ballas, dijo que el deporte fue su trabajo diario, que gracias a este pudo tener revancha en su vida y en consecuencia se considera como un ejemplo de superación por todas las cosas malas que tuvo que vivir y pudo superar.
Además, el ganador del titulo mundial de boxeo reveló una anécdota muy especial junto a otro gran referente del deporte como lo fue Diego Armando Maradona y dijo: «Mi anécdota con Maradona fue en el vestuario del Luna Park, donde se acercó su apoderado y me preguntó si podía venir a saludarme, imaginate, la figura del momento era Maradona y me venía a pedir que nos sacáramos una foto, la verdad que esa noche me explotó la cabeza».
En cuanto a salir campeón mundial de boxeo de tan joven Ballas expresó: «fue algo muy fuerte ya que antes de esto me ganaba la vida vendiendo peines y curitas, y de un día para el otro pase a ser un ídolo, no estaba preparado para ser eso».
Asimismo, el ex boxeador dijo que califica a su carrera como positiva porque ganó todo los títulos que tiene que ganar un boxeador, campeón provincial, argentino, sudamericano, latinoamericano y del mundo. Además resaltó que en la actualidad, en Argentina, es el único campeón del mundo con 58 peleas invicto.
El deportista a pesar de esta fama y títulos conseguidos tuvo una vida complicada, le tocó pelear contra las drogas y el alcohol, también el estar preso pero Ballas confesó en una entrevista con La Nación, que su ciudad, Villa María, le pagó la fianza y lo ayudó a iniciar un tratamiento. En un mismo sentido agregó: “Cuando salí me hicieron un homenaje en la plaza Anselmo Ocampo. Yo no sabía, pero toda la recaudación era para mí. El estadio estaba repleto y cuando me nombraron no quería salir. Tenía vergüenza, impotencia. Yo era un drogadicto, un alcohólico, no era más campeón. Pero me llevé la sorpresa más agradable de mi vida. Todos de pie gritando dale campeón… Ahí me juré ser otra persona y no defraudar a mi gente. Y aquí estoy”, aseguró.
El campeón mundial consideró que en la actualidad los boxeadores argentinos no llegan a pelear por títulos mundiales a falta de una exigente preparación tanto física como mental y también porque mayormente los hacen pelear por el titulo con poca experiencia.
El apodado como Mandrake, haciendo referencia a un mago, comentó que su referente como boxeador fue el argentino, Nicolino Locche y que los mejores boxeadores de su generación fueron Falucho Laciar, Maruyama y a nivel local Daniel Bracamonte y Hugo Quartapelle. Además agregó que en la actualidad no sabría a quien destacar como boxeador ya que no consume boxeo.
Por último, Gustavo Ballas dejó un consejo a todos aquellos, niños, adolescentes y jóvenes que están incursionado en carreras deportivas y expresó: «Soy la persona indicada para darles un consejo, porque me equivoque mucho deportivamente, les diría que tomen como una verdadera profesión el deporte que practican y que no se dejen tentar por el éxito y los aplausos», Concluyó.
Noticia realizada por Martina Fava y Gianluca Moriconi, pasantes de la Lic. en Comunicación Social UNVM.